La adolescencia es la etapa en la que empezamos a tomar conciencia de nuestra identidad, por eso ha sido descrita por muchos filósofos como la más apropiada para la filosofía. El positivista Comte llegó incluso a hablar de la filosofía como la adolescencia de la humanidad, preparatoria de la etapa científica.
Sin embargo, a menudo esta se presenta de una manera aburrida y ajena a nuestros problemas cotidianos. Nosotras creemos que la filosofía está en nuestro día a día y que es una actividad fundamental para orientarnos en la vida de manera autónoma y ser más felices. Por esto en nuestros talleres hacemos que la reflexión filosófica parta de los intereses de los jóvenes y limitamos nuestro papel a acompañar su proceso, proporcionar los materiales que para nosotras son más accesibles y ayudar a mejorar sus habilidades de pensamiento y cuidados mediante la formulación de preguntas.
